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Summary: El progreso hacia el desarrollo depende de que las mujeres y las niñas logren la igualdad A pesar de los grandes avances logrados en los últimos decenios por las mujeres, éstas todavía son objeto de discriminación, violencia y explotación en todo el mundo, afirmó hoy Ann M. Veneman, Directora Ejecutiva de UNICEF. "Hoy en día, en todo el mundo, y especialmente en los países en desarrollo, las niñas y las mujeres sufren en silencio, fuera del alcance de las cámaras y de la atención de la sociedad", afirmó Veneman en su discurso de apertura del Banquete Anual del Día Internacional de la Mujer, que se llevó a cabo en Washington, D.C. "En un número demasiado elevado de naciones y regiones se sigue desvalorando o rechazando a las mujeres, y se las sigue tratando como ciudadanas de segunda clase. Son víctimas del trato más injusto, cuando no de cosas mucho peores". Veneman hizo hincapié en la relación estrecha entre la igualdad de las mujeres y el progreso hacia el desarrollo, y denunció el abuso y la explotación generalizados que sufren las mujeres y los niños y niñas, como los actos de violencia sexual que se cometen durante los conflictos armados, la trata de personas y determinadas prácticas, como los asesinatos por honor, los crimines por causa de la dote, el casamiento de adolescentes y la mutilación o excisión genital femenina. "La violencia contra las mujeres es la manifestación extrema de la desigualdad, y resulta difícil imaginar una acción que resulte más perjudicial o que tenga efectos negativos más duraderos para las mujeres que la violencia sexual", agregó Veneman. Al tiempo que hacía notar que la violencia sexual no se limita a ningún país ni cultura en particular, Veneman dijo que se trata de un fenómeno que adquiere dimensiones inusitadas en los países en desarrollo y en las zonas de conflicto. Y comentó que, durante el genocidio de 1994 en Rwanda, unas 500.000 mujeres sufrieron violaciones y palizas, frecuentemente por hombres infectados con el VIH. Veneman se refirió también a algunas niñas y mujeres que conoció la semana pasada en la República Democrática del Congo, quienes habían sido objeto de agresiones sexuales. Entre ellas se encontraban una niña huérfana de 12 años de edad que fue violada y golpeada por cuatro hombres cuando recogía leña y una mujer de 60 años que fue maniatada, violada y golpeada por dos soldados que la atacaron cuando se internó en el campo en busca de alimentos para su familia. "La violación sexual es un arma de guerra que se emplea para aterrar y desmoralizar a las comunidades, para vengarse de los hombres por medio de las mujeres, o porque muchos de los autores de esos crímenes creen que pueden cometerlos con impunidad", agregó la Directora Ejecutiva de UNICEF. Veneman también recalcó la importancia de la educación, en especial la educación de las niñas. Señaló que cuando las niñas reciben educación tienen más posibilidades de defenderse de las enfermedades, incluso del VIH/SIDA, y del abuso y la explotación. "Una sociedad no puede marginar a la mitad de su población y esperar consecuencias positivas", expresó. "La potenciación de las mujeres no es un asunto que compita solamente a las mujeres, sino que se trata de un tema que afecta a todos". El Banquete Anual del Día Internacional de la Mujer está organizado por el Centro de Información de las Naciones Unidas, la Fundación pro Naciones Unidas, el Fondo de los Estados Unidos en pro de UNICEF y diversos organismos de las Naciones Unidas y ONG.
Veneman también se refirió a la mutilación genital femenina, que se practica en muchos países y que tiene consecuencias físicas graves y prolongadas. Se estima que, a nivel mundial, entre 100 y 140 millones de mujeres han sido sometidas a esa intervención, y que anualmente unos 3 millones de niñas son objeto de esa práctica.
En octubre de 2006 se publicará el Estudio de las Naciones Unidas sobre la violencia contra los niños y las niñas, que contendrá información pormenorizada sobre la naturaleza y la magnitud de la violencia contra la niñez. El estudio se elabora en estrecha colaboración con UNICEF, que brinda apoyo en todo el mundo a programas que protegen a los niños y niñas contra la violencia, el abuso y la explotación.