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Summary: Una veintena de organizaciones de jóvenes se han manifestado en contra de la eventual aprobación de una ley de ese tipo por considerarla un respaldo jurídico a las políticas de “limpieza social”.
[GUATEMALA, 22 de septiembre de 2010] - Como han dado a conocer en las últimas horas la Asamblea Nacional de Jóvenes de Guatemala, Caldh, Trasciende, el Movimiento de Jóvenes Mayas y una docena de organizaciones más, la entrada en vigor en El Salvador de una ley antipandillas servirá como respaldo jurídico a las políticas de limpieza social y estimulará la aprobación de normas similares en el país. Las entidades señalaron que si bien existe una preocupación en la sociedad acerca de que entre los efectos de la Ley Antimaras del vecino país estaría que pandilleros salvadoreños huyesen a Guatemala, desde la asociación Trasciende se indicó que "no se debe crear leyes sólo para reaccionar a las que se crean en otro país". En tanto, Abner Paredes, del Programa de Derechos de la Juventud de Caldh, puso en duda que la legislación recién aprobada vaya a ser aplicada correctamente en El Salvador debido a que sus autoridades "no tienen la capacidad de encerrar en la cárcel a todos los jóvenes que tengan tatuajes". La iniciativa de ley contra la delincuencia común y la rehabilitación del Delincuente Juvenil, propuesta por la bancada Lider en Guatemala, cataloga como delito la identificación pandillera en la que "incurre quienes se identifiquen como miembros de maras o pandillas por medio de señas o tatuajes". En este marco lo mismo le sucedería a los pandilleros –o integrantes de grupos que ayudan a los jóvenes a salir de las maras, como los que utilizan el hip hop-, quienes caerían en la falta de "desfiguración de paredes" por cometer un daño sobre "la pared de una edificación pública o privada, habitada o no, mediante cualquier inscripción, palabras, figuras, símbolos, marcas o diseños". A pesar de los dichos del diputado Luis Mendoza, de Lider, la iniciativa propuesta por su bancada contempla "mayores penas para los adultos que inciten o involucren a los jóvenes en los delitos", hay organizaciones que afirman que ésta estigmatiza, discrimina y vulnera en la integridad como seres humanos y sujetos de derechos a los jóvenes. Por su parte, en cuanto al tema de posible migración David Martínez Amador, de la Red de Investigadores Latinoamericanos por la Paz y la Democracia, desestimó que la puesta en vigor de la Ley Antimaras en El Salvador impulse la emigración de pandilleros a Guatemala y dijo: "La movilización ya está ocurriendo, y no responde a las leyes, sino a que necesitan aglutinar más territorio para sus operaciones". Información adicional