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[29 de junio de 2013] - La representante especial del secretario general de Naciones Unidas sobre Violencia contra los Niños, Marta Santos Pais, visitó El Salvador para ver de primera mano los avances, las deudas y los retos que tiene por delante el Estado en la materia que la ocupa. Sin querer dramatizar la situación pero siendo sincera con lo que hay y lo que debe haber, Santos Pais dijo a LA PRENSA GRÁFICA que es fundamental apostar más a la educación. El país invierte cerca de un 3 % del Producto Interno Bruto (PIB) en ese ramo y un 20 % en seguridad, comparó la funcionaria. ¿Cómo visualiza esta situación en El Salvador? No se trata este tema como que fuera una emergencia, como que fuera una crisis, como que fuera una preocupación dramática y prioritaria. Es fundamental que la opinión pública y las instituciones del Estado reconozcan el imperativo de considerar esta temática no solo como un termómetro de la forma como se está tratando de garantizar los derechos de la niñez... pero como se está comprometiendo el desarrollo del país. ¿Es vital verlo así, como algo de emergencia? Lo veo de emergencia, pero como una prioridad al mismo tiempo. La emergencia algunas veces significa que tenemos que reaccionar, pero después todo vuelve a lo normal... La crisis es muy profunda. Es una crisis de valores que no reconoce la importancia, la relevancia de la niñez y de la adolescencia. No reconoce el imperativo de invertir en la infancia como forma de garantizar el desarrollo del país. ¿La inversión en educación debe ser prioridad? Es fundamental porque los niños pasan muchos años en la escuela y es ahí donde se puede aprender a tener una experiencia democrática, de respeto, de tolerancia, de solución pacífica de conflictos de divergentes opiniones. ¿Qué se puede esperar si no se invierte? Si no se invierte en la educación, el espacio de la escuela es un espacio de inseguridad, espacio de miedo, es un espacio donde en 300 centros educativos en El Salvador es necesario tener policías en el interior de las escuelas (...) que no es la solución para la promoción del derecho a la educación de la niñez y no ayuda a alcanzar el objetivo de la educación, que es desarrollar los talentos, capacidades para la vida de cada niño. ¿Es en las escuelas donde deben centrarse los esfuerzos? La falta de inversión significa una escuela un espacio que no es seguro; pero significa también profesionales que no están capacitados para identificar síntomas de violencia, para escuchar a los niños que están con miedo. Significa que la educación sufre en su contenido, sufre en su utilización y crea espacios de abuso y de victimización de la niñez. ¿Se está invirtiendo poco en la educación? La inversión de la educación en El Salvador es cerca del 3 % del Producto Interno Bruto (PIB) y el gasto en seguridad es más del 20 %, entonces estamos en un contexto de una completa reversión de las prioridades para el desarrollo humano del país. Es fundamental aumentar la inversión de la educación. Yo creo que un mínimo de inversión tendrá que hacerse para ver alguna diferencia y triplicar el valor de inversión en la educación, la cual tiene que ser vista en todas las etapas; pero sabemos que la que hace una diferencia más profunda es la primera infancia. Ante esto, ¿se pone en riesgo alcanzar los Objetivos del Milenio? Claramente. Los países donde existe violencia son los que tienen tasas más altas de pobreza, tienen más fuerte deserción escolar (muchas veces por miedo o por embarazo precoz) y tienen niveles de exclusión social que en realidad comprometen el desarrollo de la nación. Estamos muy cerquita de 2015 (meta para cumplir los Objetivos del Milenio), pero tenemos que pensar que esta agenda es mucho más a un largo plazo. El trabajo infantil se mantiene en los primeros años de vida, pero ha incrementado el trabajo peligroso. ¿Cómo analiza esto? La primera infancia multiplica la inversión. Lo que se invierte en los primeros años de vida se va a reproducir a nivel de capacidad de desarrollo cognitivo y más tarde en la vida. La inversión en la educación va a garantizar que tengan interés en mantenerse en la escuela, que puedan reconocer que con las herramientas en la relevancia del contenido de los programas escolares van a estar mejor preparados para elegir una profesión que no es la mínima posible que nadie quiere, pero es una profesión que ayuda a la realización personal y a la autoestima. ¿Cómo ve el papel del CONNA? Es una importante contribución en el proceso de protección integral de la infancia. Es fundamental que el consejo pueda desarrollar y acelerar el desarrollo de todos los mecanismos, incluyendo a escala local, para garantizar que los consejos locales de derechos puedan intervenir y apoyar a los niños en sus municipios. ¿Cómo ve la Política Nacional Integral de Niñez y Adolescencia? Es muy buena noticia que se tenga y que se desarrollará un Plan Nacional de Acción con identificación de medidas más concretas para garantizar su implementación. Es fundamental garantizar que existan recursos financieros para asegurarse de que la aplicación de la política y del plan serán una realidad. Es fundamental encontrar soluciones urgentes para apoyar a los niños que están sufriendo y que están en riesgo. ¿Se debe acelerar el paso? Sí, pero también promover una alianza del CONNA con otras instituciones y otras experiencias. La riqueza es grande, pero hay que ponerla a trabajar a favor de la protección de los derechos de la niñez. Información adicional: